Con el arte es posible construir un mundo más justo, más limpio y equilibrado, afirma
Con la premisa de que el teatro es una alternativa para humanizar y contribuir a la creación del imaginario infantil, el artista escénico Manuel Maciel, aseguró que Acapulco se puede convertir en un polo importante para las artes escénicas. Ante eso, recalcó, lo importante radica en la creación de públicos a los que se tiene que atraer mediante un discurso atractivo, pero no vacío.
Manuel Maciel actualmente se encuentra estudiando el diplomado Participación infantil y juvenil, hacia la creación de mundos posibles, en Tepoztlán, Morelos, con el respaldo de
Durante un mes irá de intercambio a España, para aprender las técnicas con las que se trabaja con los infantes en esa nación, por lo que ya informó a la secretaria de Desarrollo Social, Fabiola Vega, su cancelación para participar en el Festival
Entrevistado para
Resaltó que el valor de la legalidad es fundamental para lograr la convivencia equilibrada en la sociedad y que esta comienza desde que los padres ponen el ejemplo a sus hijos: “al romper una promesa, estás enseñando que se pueden romper las reglas”.
En ese sentido consideró su trabajo teatral, como un trabajo de perspectiva política “como un posicionamiento ante la vida, no la política electoral, sino toda la cuestión ideológica que conlleva. Los niños son sujetos de derechos políticos”.
Sus planes
Maciel comenzó su carrera dentro del teatro cuando estudiaba la preparatoria, hoy día, es coordinador del encuentro de teatro Juan Alvarez, que se desarrolla en Acapulco. Como muchos jóvenes, tuvo que salir del estado a formarse en la práctica debido a la ausencia de escuelas de arte en Guerrero.
–¿Cómo hacer para que las ideas que planteas (de legalidad, derechos de los niños, entre otras) aterricen en una puesta en escena?
–Hay varias técnicas u opciones: una es hacer teatro de niños para niños; otra hacer teatro de adultos para niños, y una más que se me ocurre es hacer teatro de niños para adultos. Las metodologías pueden ser distintas, pero allí está la materia prima: escuchar la voz de los niños.
–En Acapulco existe el encuentro Juan Alvarez, recientemente se realizó el encuentro nacional de teatro del Centro Libre de Experimentación Teatral y artística (Cleta), y pronto se realizará el tercer ciclo Ola Nueva, coordinada por Gabriel Brito ¿Cuál es el panorama para el teatro en el puerto?
–No es gratuito que el Cleta haya decidido hacer su encuentro aquí. En el caso de Ola Nueva no podré acudir porque estaré en España, pero dejaré mi ponencia escrita. En sí el planteamiento que haré allí es ¿Si tuvieras todo el dinero y todos los recursos, qué harías por el teatro en Acapulco?
Quizá Gabriel Brito me contestará ‘hago Ola Nueva’, y allí está la respuesta, podemos hacer de Acapulco un polo a nivel mundial teatralmente. Todo es parte de un mismo proceso: apoyar a los movimientos es tener visión.
En coincidencia con otros creadores escénicos, Maciel comentó que el principal problema es la falta de públicos, pues de nada serviría tener toda una infraestructura teatral si la gente no acude a las salas.
Por ello propuso un cambio en las políticas culturales que lleve el teatro a las colonias y barrios como una alternativa para la gente de Acapulco.
http://www.lajornadaguerrero.com.mx/2008/09/25/index.php?section=cultura&article=017n1cul
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